En 2018, el Partido Acción Nacional aventajaba por mucho la carrera hacia la alcaldía de Guadalupe con gran cantidad de votos a favor de su candidato, Pedro Garza Treviño, perfilándose un triunfo inminente.
El panista superaba con casi 10 puntos a la entonces candidata priista Cristina Díaz Salazar; "Definitivamente, en Guadalupe hay hartazgo del PRI y la gente no se creyó la guerra sucia y no se cree más mentiras", afirmó en su momento Garza Treviño.
Ese 1 de julio, el PAN ganó la alcaldía de Guadalupe. Sin embargo, luego de la anulación de varias casillas por un juicio de inconformidad del PRI ante el Tribunal Electoral del Estado la elección se revirtió a favor del Revolucionario Institucional.
La Comisión Municipal Electoral de Guadalupe, Nuevo León, entregó a la priista Cristina Díaz Salazar la constancia que la acreditaba como alcaldesa electa.
Ante esto, sólo se limitó a realizar un plantón afuera del Palacio Municipal cuando que al PAN aún le quedaba como último recurso en el caso, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para solicitar imparcialidad.
Pedro Garza Treviño, que en el pasado argumentaba que la elección de Guadalupe la había ganado, nada hizo para defender su teoría que sólo quedó en eso, un juego de palabras que jamás llevó a ningún lado al ex candidato.
La mayoría de la gente creía que Pedro Garza había perdió la fe, pues creyeron que no hizo lo suficiente para defender su supuesto triunfo, pero más desilusionados quedarán ahora que regresó en busca del Distrito 11 como Diputado Federal y la mayoría se entere que no podrá con esta labor.
Y así se augura ya que el sentir ciudadano es que no podrá con la encomienda; porque cuando tuvo la oportunidad de tener la victoria, se dio por vencido y decidió no proteger el voto de los ciudadanos, menos podrá velar por sus intereses.
תגובות